¿Cuántas personas planifican sus vacaciones tras ver un escenario, ciudad o región en películas o series, ya sea en el cine o en plataformas, que les haya gustado tanto que decidan elegir viajar a cierto país? ¿Y esto qué valor y beneficio implica para el turismo de un país?
Según el profesor Eugeni Osácar Marzal, en su artículo Del turismo y el cine al turismo cinematográfico, “son innumerables los ejemplos de películas que tras su éxito cinematográfico han influido de manera determinante en una ciudad o un paisaje. Este fenómeno no es nuevo, sino que ya se producía en los años cincuenta del siglo pasado”.
“Hoy en día son muchos los países que están desarrollando nuevas estrategias de marketing vinculadas al cine y al turismo. Los espacios reales transformados en localizaciones audiovisuales producen en los espectadores, una influencia consciente o no, que les induce a incorporar a su imaginario personal los lugares donde se desarrollan sus producciones favoritas. Así pues, las películas [o series] se convierten en un auténtico generador y canalizador de turismo. Atraer grandes producciones a los escenarios naturales, captar nuevos segmentos de público, aumentar las visitas a lugares menos conocidos, posicionar el destino o crear nuevos productos turístico-culturales son algunas de las consecuencias de este nuevo marketing estratégico y operativo aplicado al turismo cinematográfico”.
“La búsqueda de nuevas sensaciones y experiencias visuales forman parte tanto del ritual de las salas de cine como del hecho de viajar. De todas maneras, más allá de los evidentes paralelismos que pueden existir en la propia naturaleza del cine y del turismo, existen otros aspectos por los que ambas actividades pueden relacionarse y beneficiarse mutuamente”.
Este panel contará con las visiones de distintos actores que hablen sobre casos de éxito que han tenido en sus países, y de los beneficios y el valor cultural que se genera tras abrir un país como localización a un proyecto audiovisual.